Elabora la hidratante que más se adapte a tu tipo de piel

¡SELLAR CON BROCHE DE ORO, FINALIZAMOS CON LA HUMECTACIÓN!

El uso de productos humectantes se explica por la necesidad de compensar la falta de sebo en la piel o para subsanar la falta de agua generada por la deshidratación. Este es tal vez uno de los productos cosméticos más antiguos en la historia de la humanidad.

Son generalmente formulados con ingredientes, humectantes o emolientes que ayudan a la piel a retener o sellar la humedad para prevenir la perdida de agua y para proteger y restaurar la barrera cutánea. Los productos humectantes formulados para pieles grasas suelen tener una consistencia más ligera y acuosa, Mientras más densa o rica sea la fórmula humectante, es posible que tenga más cantidad de ingredientes emolientes, que son a menudo de naturaleza oleosa.

Hidratar es aportar agua a la piel para mejorar su capacidad de absorber humedad y nutrientes, y humectar es atrapar y retener la humedad para construir la barrera protectora natural que evita cualquier pérdida de agua.

TIPOS DE PRODUCTOS HUMECTANTES

Emulsiones:

Se trata de un hidratante ligero que ha sido formulado con algunas gotas de aceite. Son usualmente recomendados para pieles grasas y mixtas.

Lociones:

Este producto se encuentra en la frontera entre la emulsión y la crema. Por lo general se recomiendan para todo tipo de piel.

Cremas:

Están formuladas con una mayor concentración de aceite, lo que hace sean excelentes emolientes. El propósito de las cremas es no dejar escapar la humedad de la piel. Son ideales para las horas de la noche, pues es este el momento en que nuestra piel se regenera.

Cremas en formato gel:

Se absorben más rápido por su textura ligera y a base de agua. Son recomendadas para hidratar pieles grasas o propensas al acné.

Aceites faciales:

Los aceites faciales suelen ser muy ligeros y de fácil absorción. Contrariamente a lo que se podría pensar, son ligeros y no dejan una sensación grasosa en la piel, más bien queda con una textura satinada. Son recomendados para reparar la barrera cutánea y fortalecer su barrera de humectación, no deben confundirse con los aceites limpiadores de carácter emulsionable que constituyen el primer paso de la limpieza.

¿CÓMO APLICARLO?

Siempre utilizo la planta de las manos y se aplica sobre el rostro  a través de ligeras presiones o toques, esta presión sirve adicionalmente para estimular la circulación y facilitar la absorción del producto.

Mimada, aunque al principio los conceptos de hidratación y humectación son diferentes, ambos se encuentran relacionados, independientemente de nuestro tipo de piel, todos quisiéramos tenerla hidratada, es decir, con el adecuado nivel de agua y humedad.

En el siguiente Pdf encontrarás un test de los diferentes tipos de humectantes y cuál es el ideal para tu tipo de piel.

¡Con Amor… Andrea!

¡Nos vemos en el siguiente capítulo!

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